Nuestros vinos han sido elaborados con varietales de excelente calidad, cultivados en las Fincas de «Los Quemados» y «Los Llanos de Trevejos», en Vilaflor, a altitudes superiores a los 1.300 metros sobre el nivel del mar, empleando técnicas respetuosas con el medio ambiente, sin utilizar productos químicos de síntesis en el cultivo y en la elaboración. Esta agricultura respetuosa con el medio ambiente, paciencia y cariño en la elaboración, han conseguido unos vinos inimitables, con características únicas, que difícilmente encontrará en otras partes del mundo.